2019 CANADA

El destino de nuestro viaje, como muchas de las mejores cosas surge por casualidad, es cierto que cuando empezamos a organizarlo a finales de 2018 no fue la primera opción que teníamos en mente para preparar un viaje fotográfico algo mas largo de lo habitual, ya que en el mes de Junio contábamos con dos semanas para esta escapada, ahora podemos decir sin ninguna duda que ha resultado toda una sorpresa y un maravilloso descubrimiento. 

En internet pudimos encontrar muchísima información en blogs y páginas web que hablan maravillas sobre las Montañas Rocosas, incluso nos pueden inundar con miles de fotografías que nos enseñan sus hermosos parajes, yo mismo he intentado plasmar esto en las mias dando mi visión de lo vivido, pero tengo que reconocer que esto es una tarea harto difícil porque solo estando allí puedes disfrutar al 100% del alarde de excesos de sus interminables bosques, inmensos glaciares, sus lagos teñidos de las mas bellas tonalidades azules que hemos visto nunca, y montañas que parecen sacadas de un cuento.

Es cierto que de todos los viajes se saca algo positivo, algo que te llega, te inspira y que te motiva, pero solo algunos como el periplo vivido por las Montañas Rocosas de Canada, son lo que te cambian y hacen que no vuelvas a ver las cosas de misma manera.

Atrás ya han quedado los más de 5.000 kilómetros recorridos en coche, las mas de 26 horas de avión, los casi 100 kilómetros que andamos por los distintos senderos, los días calados hasta los huesos, y los que casi no pudimos dormir, pero ya estamos pensando en nuestra próxima aventura…